Conectarse
Temas similares
MALDICIONES EN LAS PELÍCULAS
Página 1 de 1.
MALDICIONES EN LAS PELÍCULAS
¡MALDICIONES EN LAS PELICULAS!
Rodajes que han terminado en fatalidad y un conjunto de accidentes en un corto espacio de tiempo han convertido en algunas películas de Hollywood en malditas. No hace falta ser muy supersticioso para estremecerse con las macabras coincidencias que han protagonizado el reparto de cada una de estas cintas. Seguro que ahora las veréis con otros ojos.
Quizá el ejemplo más escalofriante es el de “Poltergeist”. La película fue todo un éxito en taquilla y enseguida el estudio se animó a encargar las secuelas. Pero no todo fue alegría y jolgorio. Al poco de su estreno (en 1982), la actriz Dominique Dunne, que interpretaba a la hija adolescente de la familia, fue asesinada brutalmente a raíz de un ataque de celos. La joven, que contaba con tan solo 22 años, fue estrangulada por su ex-novio. Estas cosas pasan (a veces) pensarían los responsables del filme y de cara a la siguiente entrega no dudaron en jugar con fuego. Se comenta que durante el rodaje de la segunda parte de la trilogía el equipo de producción decidió utilizar esqueletos reales para el atrezzo de la película y, según creen los más puritanos, en el más allá no se lo tomaron demasiado bien. Así que la maldición golpeó de nuevo al equipo y Will Sampson, que encarnaba al chamán, desarrolló un repentino y mortal cáncer. Nada más terminar el rodaje de “Poltergeist 2″, fue el turno de Julian Beck, el sacerdote maligno en la cinta, que también falleció a causa de un cáncer. Ya eran demasiadas coincidencias así que se decidió llamar a un exorcista para que “limpiara” el set de rodaje de cara a la tercera parte de la saga. Más vale prevenir que curar, pensarían. Pero no fue suficiente, el hecho más trágico aún tenía que suceder. Poco después del fin del rodaje, Heather Michele O’Rourke, se levantó un día con fuertes dolores de barriga. La carismática Carol Anne de tan solo 12 años murió en el hospital a causa de una estenosis intestinal, una extraña y rápida enfermedad. Otros miembros del equipo técnico y artístico murieron poco después, había nacido una terrorífica leyenda.
Otro caso célebre es el de “El Cuervo”. Los accidentes se amontonaron durante el rodaje de la película e incluso uno de los carpinteros se electrocutó justo antes de comenzar a rodar. Pero el hecho más significativo y popular es el de la muerte del joven Brandon Lee. El actor, de tan solo 28 años, protagonizaba este film que pretendía lanzarlo definitivamente al estrellato. El hijo de Bruce Lee debía interpretar una escena en la que recibía un disparo. La toma se rodó en dos partes: en la primera se utilizaba una bala real para crear el efecto y en la segunda, ya con una de fogueo, se disparaba verdaderamente al actor. Pues bien, al parecer la punta de la bala real se quedó dentro del arma y cuando la bala falsa fue expulsada arrastró consigo aquella punta que impactó en el joven Lee, que falleció tan solo 12 horas después en la mesa del quirófano. El intérprete que le disparó, Michael Massee, sufrió una fuerte depresión por el sentido de culpabilidad provocado por haber matado (inconscientemente) a Brandon.
Nueve, ni más ni menos, fue el numero de personas relacionadas con la filmación de la película que murieron durante el rodaje de “El Exorcista”. Entre ellas los actores Jack McGowran y Vasiliki Maliaron, el padre de Linda Blair, el hermano de Max Von Sydow y el hijo recién nacido de uno de los cámaras. Además se sucedieron varios incidentes extraños como el incendio de los decorados, por lo cual se tuvo que suspender la filmación durante mes y medio.
El personaje de Superman también ha traído problemas a aquellos que lo han interpretado. George Reeves, el Clark Kent de la televisión, murió de un disparo con tan solo 45 años. Dicen las malas lenguas que Reeves había enloquecido hasta creerse el veradero Superman, lo cual quería demostrar sobreviviendo a un disparo en la cabeza. Aunque dicha teoría está muy en entredicho y las pruebas no determinaron que él mismo se disparara. La película de 2006 “Hollywoodland” relata estos hechos. Más popular es la mala fortuna que sufrió el primer actor en encarnar al Hombre de Acero en el cine: Christopher Reeve. Un accidente a caballo le dejó postrado en una silla de ruedas. Murió en 2004. Su mujer, Dana Reeve, falleció de cáncer tan solo 2 años después. Además, la actriz que interpretaba a Lois Lane, Margot Kidder, tuvo que ser ingresada en un hospital psiquiátrico y Richard Pryor sufrió una esclerósis múltiple que terminó con su vida en 2005. El último Superman, Brandon Routh, todavía no ha lamentado ninguna desgracia aunque, viendo como se ha desarrollado su carrera tras interpretar al superhéroe, tampoco debe estar dando saltos de alegría.
Y terminamos este repaso a las películas más gafes de la historia con “La semilla del diablo”. Dirigida por Roman Polanski, la cinta narraba la historia de una mujer (Mia Farrow) que se había quedado embarazada de forma demoníaca. Pues bien, una noche que se celebraba una fiesta en casa de los Polanski, el asesino en serie Charles Mason irrumpió en la mansión junto a su “familia” matando a sangre fría a todos los asistentes. Polanski, que no se encontraba en la celebración, perdió así a su esposa y a su hijo no-nato. Al parecer los motivos de este brutal acto vinieron provocados por el estreno de la película, que ya recibió la ira y las amenazas de varias organizaciones por el tema tan polémico (en la época) que trataba: el satanismo. Fue por ello que los de la secta de Manson asestaron 16 puñaladas en el vientre de la mujer de Polanski, Sharon Tate (en la imagen), y colgaron su cadáver del techo. Una de las acólitas de Manson, Susan Atkins, escribió “PIG” (cerdo) con la sangre de Tate. Este móvil todavía no se ha confirmado pero es la teoría que sonó con más fuerza cuando sucedieron los acontecimientos. Además, el edificio donde se rodó la película, el Dakota, fue también el escenario del mítico asesinato de John Lennon.
Rodajes que han terminado en fatalidad y un conjunto de accidentes en un corto espacio de tiempo han convertido en algunas películas de Hollywood en malditas. No hace falta ser muy supersticioso para estremecerse con las macabras coincidencias que han protagonizado el reparto de cada una de estas cintas. Seguro que ahora las veréis con otros ojos.
Quizá el ejemplo más escalofriante es el de “Poltergeist”. La película fue todo un éxito en taquilla y enseguida el estudio se animó a encargar las secuelas. Pero no todo fue alegría y jolgorio. Al poco de su estreno (en 1982), la actriz Dominique Dunne, que interpretaba a la hija adolescente de la familia, fue asesinada brutalmente a raíz de un ataque de celos. La joven, que contaba con tan solo 22 años, fue estrangulada por su ex-novio. Estas cosas pasan (a veces) pensarían los responsables del filme y de cara a la siguiente entrega no dudaron en jugar con fuego. Se comenta que durante el rodaje de la segunda parte de la trilogía el equipo de producción decidió utilizar esqueletos reales para el atrezzo de la película y, según creen los más puritanos, en el más allá no se lo tomaron demasiado bien. Así que la maldición golpeó de nuevo al equipo y Will Sampson, que encarnaba al chamán, desarrolló un repentino y mortal cáncer. Nada más terminar el rodaje de “Poltergeist 2″, fue el turno de Julian Beck, el sacerdote maligno en la cinta, que también falleció a causa de un cáncer. Ya eran demasiadas coincidencias así que se decidió llamar a un exorcista para que “limpiara” el set de rodaje de cara a la tercera parte de la saga. Más vale prevenir que curar, pensarían. Pero no fue suficiente, el hecho más trágico aún tenía que suceder. Poco después del fin del rodaje, Heather Michele O’Rourke, se levantó un día con fuertes dolores de barriga. La carismática Carol Anne de tan solo 12 años murió en el hospital a causa de una estenosis intestinal, una extraña y rápida enfermedad. Otros miembros del equipo técnico y artístico murieron poco después, había nacido una terrorífica leyenda.
Otro caso célebre es el de “El Cuervo”. Los accidentes se amontonaron durante el rodaje de la película e incluso uno de los carpinteros se electrocutó justo antes de comenzar a rodar. Pero el hecho más significativo y popular es el de la muerte del joven Brandon Lee. El actor, de tan solo 28 años, protagonizaba este film que pretendía lanzarlo definitivamente al estrellato. El hijo de Bruce Lee debía interpretar una escena en la que recibía un disparo. La toma se rodó en dos partes: en la primera se utilizaba una bala real para crear el efecto y en la segunda, ya con una de fogueo, se disparaba verdaderamente al actor. Pues bien, al parecer la punta de la bala real se quedó dentro del arma y cuando la bala falsa fue expulsada arrastró consigo aquella punta que impactó en el joven Lee, que falleció tan solo 12 horas después en la mesa del quirófano. El intérprete que le disparó, Michael Massee, sufrió una fuerte depresión por el sentido de culpabilidad provocado por haber matado (inconscientemente) a Brandon.
Nueve, ni más ni menos, fue el numero de personas relacionadas con la filmación de la película que murieron durante el rodaje de “El Exorcista”. Entre ellas los actores Jack McGowran y Vasiliki Maliaron, el padre de Linda Blair, el hermano de Max Von Sydow y el hijo recién nacido de uno de los cámaras. Además se sucedieron varios incidentes extraños como el incendio de los decorados, por lo cual se tuvo que suspender la filmación durante mes y medio.
El personaje de Superman también ha traído problemas a aquellos que lo han interpretado. George Reeves, el Clark Kent de la televisión, murió de un disparo con tan solo 45 años. Dicen las malas lenguas que Reeves había enloquecido hasta creerse el veradero Superman, lo cual quería demostrar sobreviviendo a un disparo en la cabeza. Aunque dicha teoría está muy en entredicho y las pruebas no determinaron que él mismo se disparara. La película de 2006 “Hollywoodland” relata estos hechos. Más popular es la mala fortuna que sufrió el primer actor en encarnar al Hombre de Acero en el cine: Christopher Reeve. Un accidente a caballo le dejó postrado en una silla de ruedas. Murió en 2004. Su mujer, Dana Reeve, falleció de cáncer tan solo 2 años después. Además, la actriz que interpretaba a Lois Lane, Margot Kidder, tuvo que ser ingresada en un hospital psiquiátrico y Richard Pryor sufrió una esclerósis múltiple que terminó con su vida en 2005. El último Superman, Brandon Routh, todavía no ha lamentado ninguna desgracia aunque, viendo como se ha desarrollado su carrera tras interpretar al superhéroe, tampoco debe estar dando saltos de alegría.
Y terminamos este repaso a las películas más gafes de la historia con “La semilla del diablo”. Dirigida por Roman Polanski, la cinta narraba la historia de una mujer (Mia Farrow) que se había quedado embarazada de forma demoníaca. Pues bien, una noche que se celebraba una fiesta en casa de los Polanski, el asesino en serie Charles Mason irrumpió en la mansión junto a su “familia” matando a sangre fría a todos los asistentes. Polanski, que no se encontraba en la celebración, perdió así a su esposa y a su hijo no-nato. Al parecer los motivos de este brutal acto vinieron provocados por el estreno de la película, que ya recibió la ira y las amenazas de varias organizaciones por el tema tan polémico (en la época) que trataba: el satanismo. Fue por ello que los de la secta de Manson asestaron 16 puñaladas en el vientre de la mujer de Polanski, Sharon Tate (en la imagen), y colgaron su cadáver del techo. Una de las acólitas de Manson, Susan Atkins, escribió “PIG” (cerdo) con la sangre de Tate. Este móvil todavía no se ha confirmado pero es la teoría que sonó con más fuerza cuando sucedieron los acontecimientos. Además, el edificio donde se rodó la película, el Dakota, fue también el escenario del mítico asesinato de John Lennon.
Mysterio- Guardian de Drarknillion
- Cantidad de envíos : 234
Puntos : 3693
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 22/04/2016
Edad : 33
Localización : Agazapado Entre las Sombras
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.