¡ALICE COOPER, DE ROCKERO SATANISTA, A PREDICADOR DE LA PALABRA DE DIOS!

por **Mysterio** Miér Abr 27, 2016 6:01 pm

¡ALICE COOPER, DE ROCKERO SATANISTA, A PREDICADOR DE LA PALABRA DE DIOS!

¡Esto sí que es noticia!... ¡Alice Cooper, quien hacía misas negras y aquelarres demoníacos en el escenario, ahora es un rockero cristiano!
Considerado como la indiscutible estrella de rock más comprometida con el diablo en todos los tiempos, Alice Cooper acaba de tener una transformación tan radical que ni sus más allegados seguidores lo acaban de creer.
Este hombre, quien conmocionó al mundo en los años 70 con su música satánica llena de alcohol, drogas, y en la que se exponía en sus letras temas escandalosos que iban desde asesinatos hasta la necrofilia, era considerado como ‘El máximo exponente de Satán en todo el mundo.
Vincent Furnier, su nombre verdadero, tomó prestado el nombre “Alice Cooper” de una hechicera del siglo XVII que murió en la caza de brujas de Salem.
Su vida como rockero comenzó pronto, en la escuela. Encarnó la primera camada de heavy metal junto a Deep Purple, Ozzy Osbourne y Black Sabath. Fue pionero del shock rock, codo con codo con grupos como Kiss, Twisted Sisters y el cantante satánico Marilyn Manson.
Todos ellos lo admiraban por su gran entrega hacia lo perverso y lo malévolo.
Sus conciertos no eran precisamente un recital para niños. Los solía terminar destrozando a golpes de hacha muñecos que guardaban gran parecido con unos bebés, y aparecía sobre el escenario con un espeso maquillaje negro que chorreaba desde sus ojos hasta la boca, lo que le daba un aspecto diabólico.
Todos lo veneraban y escuchaban sus consejos como venidos del gran gurú espiritual del heavy metal.
Dejaba sueltas serpientes pitones sobre el escenario, guillotinaba gallinas durante sus conciertos, blasfemaba y escupía sangre, tenía el llamado ‘pentagrama de Satán’ en la pared mientras que llevaba a todos, a ritmo de rock, a adorar al demonio.
Alice Cooper comenzó a tomar alcohol cuando inició su carrera musical y ha bebido constantemente durante 15 años.
La razón de su cambio radical fue la drástica vida que llevaba. Era un guiñapo humano y el alcohol le provocaba delirius tremens muy grandes, que lo obligaban incluso a pensar en el suicidio.
Su esposa, Sheryl, cansada en esa condición a su marido, escuchó el sermón de un predicador en una iglesia donde fue invitada, para entregarle su vida a Jesucristo.
Ella tomó su decisión y se convirtió en cristiana. Con el tiempo, habló a su esposo, quien al principio se portó muy renuente para ir.
Después de muchos trabajos, ella lo llevó a un templo en el que el ministro predicó un sermón incendiario sobre el infierno.
El religioso despertó en el controvertido músico las ganas de no querer ir al infierno, y las olvidadas oraciones y creencias de su infancia volvieron a surgir en su mente y en sus labios.
Según las propias palabras del ex rockero, “Cuando oí las palabras del ministro, sentía cada vez más un gran peso de culpa a mis espaldas. Entonces me di cuenta que estaba totalmente perdido.
“Pero cuando escuché que Jesucristo quería y podía perdonarme, me aferré a ello como a un clavo ardiendo.
“Caí de rodillas y las lágrimas me salieron de manera abundante, a la vez que decía: ‘Perdóname, Señor’.
“Lloré mucho, no sé cuando. A mi lado estaba mi esposa confortándome y el ministro oraba por mí. Los dos estaban de rodillas.
“Sentí que había hecho mucho daño a la gente con la música que tocaba, pero a la vez sentí en mi corazón que Cristo me estaba perdonando.
“Sentí un gran alivio en mi alma. Sabía que aunque yo había sido un sacerdote satánico, el Señor perdonaba todo lo que había hecho y me sentí libre... Muy libre, como jamás me había sentido en toda mi vida”.
Vincent Furnier ha dejado el rock satánico y ahora predica la Palabra de Dios a los rockeros y al que fue su público.
Muchos lo tachan de un loco, otros de un fanático religioso, y otros más, piensan que es otra de sus grandes excentricidades.
Pero su esposa dijo que su conversión fue sincera y definitiva. Dios le quitó el alcoholismo y otras adicciones de manera radical, definitiva y ahora es un hombre nuevo.
Ahora es un cristiano de convicciones muy sólidas.
En la actualidad Cooper sigue realizando sus giras de conciertos pero sin invocar a Satanás, y tocando solo rock sin connotaciones diabólicas.
En sus conciertos les presenta a todos su testimonio y les predica la Palabra de Dios.
Recientemente testificó, sus días llenos de alcohol, su fe en Dios, y como ya está impactando a algunos rockeros quienes siguen sus pasos.
Él dijo que la intervención divina fue lo que rompió sus hábitos alcohólicos “Sé que fui sanado totalmente. Eso fue un milagro de Dios. Es la única forma como lo puedo explicar... ¡El alcohol y el satanismo están absolutamente eliminados en mi vida!”.
Alice Cooper advierte a los que están en el mundo del rock: “No se puede jugar con el diablo. Si crees que todo esto es sólo una mitología, eres su blanco preferido, pues crees justamente lo que Satanás quiere que se crea de él, que es un mito.
“Sin embargo él no es un mito, estoy convencido de ello. Lo sé porque fui su principal adorador en el mundo”.
Por otro lado pidió perdón por ser el promotor de la celebración de la decadencia moral.
Dijo: “Perdónenme... Fue causa de mi ignorancia. Yo pensaba que los chicos podían acostarse con las chicas que quisieran y tomar todo el alcohol que les apetezca. Hoy en día no creo en eso ya que veo lo destructivo que es”.
Ahora acude ahora a una apacible iglesia. El músico de Detroit, de 52 años, ya no grita en el escenario ‘Ven, luzbel, ven’ sino ‘¡Ven, Cristo, ven!’.
Por último, él dijo: “Yo era una cosa antes. Ahora soy algo completamente nuevo. No juzguen a Alice por lo que solía ser. Alaben a Dios por lo que soy ahora”...